Neuropatías ópticas
     
  Clasificación

La neuropatía óptica es la enfermedad del nervio óptico producida por múltiples causas. Entre las más importantes destacan:

Neuropatías Ópticas Congénitas y Heredodegenerativas

Constituyen un grupo de enfermedades en las que existe una malformación en el nervio óptico al nacimiento o una degeneración progresiva del mismo en las primeras décadas de la vida. En ocasiones se heredan de los padres aunque también pueden no tener asociación familiar.

Normalmente no existe tratamiento ni tendencia a la mejoría. Entre ellas se podrían mencionar el coloboma de papila (defecto en la formación del nervio óptico durante el desarrollo embrionario) o la neuropatía óptica de Leber donde existe una pérdida progresiva de la visión por una degeneración del nervio.

Neuropatías Ópticas

Son enfermedades que cursan con una inflamación del nervio óptico en cualquier parte de su trayecto. Pueden estar asociadas a virus o a la administración de vacunas.

Destaca principalmente la enfermedad desmielinizante que produce un trastorno en la visión en gran parte de los casos asociado a otros síntomas neurológicos del resto del cuerpo como trastornos en la sensibilidad o el movimiento.

Siempre que se sospeche este tipo de afectación del nervio óptico hay que descartar la existencia de una esclerosis múltiple que es la enfermedad más relacionada. Es fundamental realizar pruebas de imagen como la resonancia magnética, analítica o incluso examen del líquido cefalorraquídeo.

Neuropatías Ópticas Comprensivas

Se deben a que existe una lesión o tumoración que por su tamaño comprime el nervio óptico dificultando su función, perdiendo por consiguiente agudeza visual o campo visual.

Neuropatías Ópticas Tóxico-Metabólicas

Hábitos como el consumo de alcohol crónico pueden llevar a la afectación de las fibras nerviosas. La ingestión de ciertos productos o el contacto con ellos ocasionan en ocasiones pérdidas visuales.

Neuropatías Ópticas Isquémicas

Constituyen uno de los grupos más numerosos dentro de las neuropatías. Se deben a una disminución del aporte sanguíneo al nervio óptico. El nervio óptico está constituido por neuronas que necesitan constantemente para cumplir su función el aporte de oxígeno y glucosa a través de los vasos sanguíneos. Si por cualquier causa esto no ocurriera durante un corto período de tiempo esas neuronas mueren de manera irreversible. Es un "infarto" del nervio óptico. Ocurre normalmente cuando existen factores de riesgo cardiovascular como en el infarto de miocardio, es decir, la tensión arterial, la diabetes, el colesterol o el consumo de tabaco. Una vez que se produce no tienen tratamiento por lo que la prevención es importante.

Existe un grupo de neuropatías ópticas isquémicas que afecta a personas de edad avanzada que tienen como una causa una enfermedad inflamatoria llamada la arteritis de células gigantes. En estos casos, las pérdidas de visión suelen ser más graves y afectan a los 2 ojos. Es importante instaurar tratamiento antiinflamatorio para disminuir el daño y evitar que ocurra en ambos ojos.

Neuropatías Ópticas traumáticas

Se producen por traumatismos, bien por sección total o parcial del nervio o por estiramiento del mismo, ocasionando la pérdida de fibras nerviosas y disminución de la visión.

Diagnóstico

Existen una serie de pruebas para el diagnóstico de las enfermedades del nervio óptico que complementan a la exploración clínica.

Campo visual
Con esta prueba seremos capaces de detectar dónde está la lesión y su repercusión en la visión, así como es indispensable para comprobar la evolución o mejoría de la enfermedad.
Test de colores
La percepción de los colores suele estar alterada en estas enfermedades incluso antes que la pérdida de la visión por lo que puede ser interesante para un diagnóstico precoz.
Análisis de fibras nerviosas
Existen pruebas como la OCT o el GDX que son capaces de detectar la pérdida de fibras nerviosas o incluso evaluar si existe inflamación del nervio.
Potenciales evocados
Son pruebas cuyo fin es detectar la actividad eléctrica del nervio óptico y vías nerviosas para evaluar si es normal, si existe alteración o si ha dejado de transmitir señales por completo.
Tratamiento

Por desgracia muchas de estas enfermedades no tienen tratamiento efectivo. En todas aquellas que existe una muerte de las fibras nerviosas la función visual es irrecuperable. Aquellas que cursan con inflamaciones transitorias requieren normalmente tratamiento, y dependiendo de la benignidad de la causa, puede existir mejoría.